jueves, 12 de enero de 2012

En la oficina

Al llegar a la oficina el primer día me han presentado a muchas personas, aunque las primeras eran todas occidentales, también he conocido ya algún japonés.

La primera persona japonesa que me presentaron en la oficina se apellidaba Kabuto, y claro eso es genial para un seguidor de Mazinguer Z como era yo. (El niño que pilotaba a Mazinger se llamaba Koyi Kabuto).

Pues bien, el segundo día de oficina Kabuto-san se sentó a mi lado. Y si bien ya estamos descubriendo que existen muchos tópicos sobre los japoneses que son falsos, Kabuto-san demostró que otros no lo son.

Nada más llegar sacó su ordenador y después unas toallitas desinfectantes con las que limpió el teclado casi tecla por tecla.

Cuando volvimos de comer me di cuenta mirando de reojo que Kabuto-san se había desconectado del mundo y se estaba echando un sueñecito reparador del que despertó después de unos 15 minutos.

Alrededor de él había otros japoneses durmiendo recostados en la mesa como haciamos nosotros en parvulitos.

Así que esos dos tópicos son ciertos. Grande Kabuto-san.

1 comentario:

  1. Y luego dirán que somos vagos por dormir la siesta, cosa que nadie hace en España...

    Si algún truco tienen que tener, si no serían autómatas inhumanos...

    En cuanto a lo de las teclitas...
    Como diría Astérix: Estos japoneses están locos!!!!

    Por lo demás... es normal en el trato?

    ResponderEliminar